El grupo cárnico Fribin, la primera empresa de Huesca por facturación, mantiene la pujanza y buena salud de su negocio. El pasado año, en el que cumplió medio siglo de vida, las ventas totales de la compañía ascendieron a 242 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 6,7% respecto al 2015 (226 millones). La producción de carne se incrementó en una proporción similar, el 8%, hasta los 104.500 toneladas. El tirón del porcino, debido a la fuerte demanda del exterior, y el repunte de las exportaciones, que suponen ya el 58,5% de su cifra de negocio, marcaron los resultados del último ejercicio, en el que la firma de Binéfar acometió además la primera fase de la gran reforma y ampliación de su matadero de cerdos.

Fribin atesora 50 años de dedicación a la carne de ganado porcino y vacuno, sector en el que se ha erigido en una de las principales industrias de Aragón y la séptima a nivel nacional (la cuarta en vacuno y la 14 en cerdo). Con 560 trabajadores entre personal interno y externo, 120 personas más que en el 2010, la empresa se consolida como uno de los principales actores económicos de la comarca de La Litera y de Huesca.

El porcino es hoy su principal actividad, con una producción que el pasado año aumentó un 10%, hasta 80.000 toneladas, y unas ventas de 141 millones de euros, es decir, el 58% del total. En el vacuno, por su parte, alcanzó las 22.800 toneladas, un 2,6% más que en el 2015, mientras que las ventas llegaron a los 97 millones. A gran distancia de estas dos grandes líneas de negocio se encuentra la de productos procesados (jamones, embutidos), cuya fabricación se redujo en un 20%, hasta 800.000 kilos, debido a que racionalizó la comercialización de algunos alimentos «por razones estratégicas».

más exportación / Desde el grupo Fribin están satisfechos con los resultados. «Ha sido un año normal. En el porcino los precios han estado bajos y en el vacuno se han sostenido», comentó a este diario el director general, Josep Rosanas. Las perspectivas para el 2017 pasan por elevar de nuevo las cifras de producción y facturación, algo a lo que Rosanas cree que ayudará la mejor posición de los valores del cerdo. «Vamos a intentar seguir creciendo en el mercado porcino, que vive una época de fuerte demanda y consumo», aseveró.

En cuanto a exportaciones, estas supusieron el 58,5% del total de ventas de Fribin (el 62% en porcino y 56% en vacuno), cuatro puntos por encima del 2015 (54%) y en lo que va de año la cifra se sitúa en el 60%. «Hemos consolidado mercados y crecemos en exportación, que es el motor de nuestro negocio porque el mercado nacional está plano», señaló.

Las inversiones de Fribin el pasado año fueron de 7,5 millones y se centraron en la primera fase de la modernización y ampliación del matadero porcino, a la que prevé destinar 15 millones en los próximos tres años. Con este proyecto, la capacidad de sacrificio crecerá un 40%: de 3.600 cerdos al día a unos 5.200.