La comisión de investigación de CAI --integrada por los ponentes de los cinco grupos parlamentarios-- presentará hoy, durante la celebración del pleno de las Cortes de Aragón, su dictamen sobre la gestión llevada a cabo en la caja aragonesa a partir del año 2000. A la espera de conocer el documento en su integridad, todo apunta a que las conclusiones, según ha podido saber este diario, serán críticas con la forma de actuar de los responsables de la entidad, aunque no serán tan contundentes como para que de ellas se deriven actuaciones jurídicas o se adopten responsabilidades políticas.

Ello se debe, fundamentalmente, a que el documento, que será expuesto por el portavoz de la comisión, Antonio Ruspira, no ha podido reflejar la información que en su día se requirió a CAI relativa a las actas de los principales órganos de gobierno de la entidad. El grupo de trabajo tampoco ha podido contar con los informes del Banco de España, pese a haberlos solicitado en varias ocasiones, ni con los del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), que se hizo con más de 2.200 millones de euros en activos tóxicos de la caja.

UN TRABAJO DE 6 MESES

La comisión comenzó a trabajar el pasado mes de mayo. Desde entonces se han llevado a cabo un total de 25 encuentros de trabajo y ocho sesiones públicas de comparecencias, en las que fueron citadas 40 personas relacionadas con la caja (directivos y exdirectivos, presidentes, consejeros de Economía de la DGA y sindicatos, entre otros.).

Si el pleno de las Cortes de Aragón valora hoy positivamente el documento de conclusiones elaborado en el seno de la comisión de investigación y aprueba el texto en la votación que se establece en el reglamento, el dictamen será publicado en el Boletín Oficial de las Cortes de Aragón al día siguiente de su aprobación.