Las farmacias pueden ahorrarse hasta un 40 % en su consumo energético, si adoptaran sistemas eficientes de iluminación y refrigeración, todo ello con una inversión que no tardaría en recuperarse más de tres años.

Esta es una de las experiencias desarrolladas por la Universidad de Zaragoza y el Colegio Oficial de Farmacéuticos de la ciudad y que se expone hoy en el I encuentro EcoInnovación, organizado por el Centro de Investigación de Recursos y Consumos Energéticos (CIRCE), en la capital aragonesa.

Según ha explicado hoy a EFE antes de participar en el encuentro José María Agudo, investigador del Departamento de Dirección y organización de empresa de la Universidad de Zaragoza, en la capital aragonesa se hizo un estudio en el que participaron 39 de las farmacias de las 290 de la ciudad y se comprobó que renovando los sistemas de iluminación y refrigeración por otros más eficientes, se ahorraba entre un 30 y un 40 % de costes.

Además, se vio que la inversión necesaria para llevar a cabo estos cambios en una farmacia se recuperaba en un periodo inferior a tres años.

El objetivo de este encuentro de hoy es transmitir a las cien empresas participantes las ventajas de mejorar la eficiencia en el uso energético.

En este acto, está previsto que diez compañías expliquen la inversión que han realizado en sus establecimientos y el ahorro en los costes de producción que han logrado, en un determinado plazo de tiempo.

Entre los participantes están Supermercados Simply, que ha reformado sus sistemas de refrigeración y climatización de veinte centros en Aragón; Endesa, que ha mostrado las aplicaciones energéticas que ha desarrollado en pequeñas y medianas empresas (pymes); Riegos del Alto Aragón; o el Balneario de Panticosa (Huesca), que utiliza calor el residual de sus aguas termales, para reducir el consumo.

El objetivo de este encuentro es "despejar" las dudas que las empresas, especialmente las pymes, puedan tener sobre la conveniencia de adoptar medidas de eficiencia energética, ha comentado a EFE la directora del área de Socioeconomía de CIRCE, Sabina Scarpellini.

Estas medidas no sólo van dirigidas a las plantas de producción, donde la reducción de costes puede ser más "significativa", sino también a aquellas empresas del sector servicios, ha precisado.

Con medidas como estas no sólo se ahorra costes, sino que se reduce la emisión de gases contaminantes a la atmósfera y se ofrece al cliente una imagen de empresa sostenible, ha asegurado Scarpellini, organizadora del foro.

En esta labor, Aragón está muy bien posicionada en comparación con el resto de Comunidades Autónomas, según ha indicado Scarpellini, pero hace falta que cada vez sean más las empresas que se decidan a poner en marcha estas buenas prácticas, a pesar de la dificultad para lograr financiación con la que llevar a cabo la inversión, ha concluido.