El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, ha confirmado hoy a los sindicatos UGT y CCOO que la reforma fiscal, que se aprobará previsiblemente este viernes, recogerá una reducción del IRPF en todos los tramos también en las rentas más altas. Así lo han expresado en rueda de prensa el secretario general de UGT, Cándido Méndez, y el secretario de Protección Social de CCOO, Carlos Bravo, tras mantener una reunión con el ministro de Hacienda dentro de la ronda de conversaciones iniciada ayer por el Gobierno con empresarios y autónomos para informar del anteproyecto de reforma fiscal.

Méndez también ha dicho que tenía la "impresión" de que el Gobierno no prevé mover los impuestos de alcohol y tabaco. Además, ha señalado que los únicos impuestos especiales en los que el Gobierno tiene "voluntad" de avanzar son los medioambientales pero "los refieren a las comunidades autónomas", ha precisado.

Ambos representantes sindicales han criticado que las medidas del Gobierno respondan a una reforma para el período electoral, y en ese marco han situado la reducción del IRPF en todos los tramos. Méndez ha propuesto una doble vía: subir los salarios y bajar el IVA de los artículos de primera necesidad y por contra aumentar el impuesto de valor añadido en los artículos de lujo.

El líder de UGT ha defendido la recuperación del poder adquisitivo de los salarios pero también mejorar la situación de los trabajadores con esa rebaja en los productos de primera necesidad, que pasarían del IVA reducido al superreducido.

Los dos sindicatos han abogado por la lucha contra el fraude con más dotación de personal de la Agencia Tributaria y han recordado que mientras en España hay 60 empleados públicos de la AEAT por 100.000 habitantes, en la eurozona existe un promedio de 130 empleados por cada 100.000 habitantes, más del doble.

Tanto UGT como CCOO han criticado que la información del Gobierno se haya limitado a una "exposición verbal" de unas líneas generales pero sin ningún documento escrito.

El responsable de CCOO ha lamentado que el Gobierno quiera afrontar la falta de la demanda interna mediante una reducción de los impuestos directos y manteniendo de forma invariable la imposición indirecta.