La digitalización de la industria es irrefrenable y avanza a gran velocidad. Quien no se adapte a este cambio de paradigma está condenado a quedar fuera de juego. Así lo advirtió ayer en Zaragoza el consejero delegado de Siemens Industria para España y Portugal, Pascual Dedios-Pleite, quien puso de relieve el potencial con que cuenta Aragón para emprender el difícil y costoso camino hacia la llamada industria 4.0 (la cuarta revolución) gracias a la pujanza y la especialización de la comunidad en este sector clave, donde destaca por la «competitividad» de sus empresas en automoción, logística, papel o electrodomésticos.

El directivo de este gigante tecnológico, que invierte cada año 3.000 millones de euros en I+D, fue uno de los ponentes destacados de la jornada Tendencias de mañana para dirigir hoy, organizada en el CaixaForum Zaragoza por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) de Aragón y Caixabank.

Según Dedios-Pleite, el 45% de la industria permite introducir «soluciones drásticas de cambio» y el 50% de los directivos españoles creen que existen «tecnologías disponibles» para que sus empresas mejoren sus procesos de producción. A pesar de estos datos, España está «rezagada» en la carrera de la digitalización industrial, lo que atribuyó a las «resistencias al cambio» de las organizaciones y a los elevados costes que conlleva esta transformación. «La tecnología cuesta dinero», reconoció, pero animó a las compañías a no quedarse atrás en este proceso: «no podemos esperar a que las cosas cambien solas». En este sentido, reclamó más apoyo de las Administraciones Públicas para que las empresas puedan acometer su transformación digital.

Calidad de empleo / El experto advirtió también de que si España no da el salto digital perderá competitividad y la industria, que proporciona «los empleos de más calidad», reducirá su peso en la economía nacional. Hoy supone el 13% del PIB (en Aragón, el 20%) frente al 23% de Alemania. Otro aspecto que consideró prioritario es la ciberseguridad, que «va a tener una importancia fundamental en nuestras vidas y fábricas», recalcó.

En la apertura de la jornada, el director de Caixabank en Aragón, Raúl Marqueta, abogó por conjugar las ventajas de la banca digital con los del canal presencial, que aporta «valores e inteligencia emocional». Estos dos modelos, dijo, deben «aprender a convivir» dada la «incertidumbre» que ahora se produce.