El Ministerio de Trabajo no dispone de margen presupuestario para impulsar la contratación indefinida mediante bonificaciones y, a la vez, realizar una rebaja generalizada de cuotas sociales. El departamento está dispuesto a discutir ambas posibilidades con los agentes sociales pero deben ser ellos, y principalmente los empresarios, quienes elijan una de las dos alternativas.

El secretario general de Empleo, Valeriano Gómez, es partidario de "mantener, reforzar y extender las ayudas a la contratación indefinida" pese a que la patronal y los sindicatos las han calificado de ineficaces en numerosas ocasiones.

"Además, con los 2.103 millones de euros que se destinan anualmente a bonificar los contratos estables sólo habría dinero para reducir un punto las cuotas sociales de todos los contratos", aseguró Gómez. El secretario general tampoco se opone a una reducción de cotizaciones siempre que se acuerde en la mesa de negociación y que la medida beneficie sólo a los nuevos contratos indefinidos. "Podríamos estudiar un nuevo modelo que premiara a las empresas que mantienen y aumentan sus plantillas estables", dijo el responsable ministerial.