Las obras de urbanización en una avenida de Tauste han confirmado lo que varios expertos ya habían adelantado años atrás: que la necrópolis islámica del municipio zaragozano, datada entre los siglos VIII y XI y una de las más antiguas de la península, albergaba un gran número de enterramientos. Según informaron desde la Asociación Cultural El Patiaz, esos trabajos han sacado a la luz en las últimas semanas más de 400 tumbas. Hasta ahora, en las cuatro catas que había impulsado la citada asociación entre el 2010 y el 2013 se habían encontrado y estudiado 46 enterramientos y sus correspondientes esqueletos. Unos hallazgos que constatan que Tauste fue una población de notable importancia en época andalusí.

«Ya predijimos que en la necrópolis podía haber unos 4.500 individuos», subrayó a este diario el arqueólogo que dirigió las cuatro excavaciones anteriores, Francisco Javier Gutiérrez.

De los trabajos actuales se encarga la empresa Paleoymas SL, que estima que en el plazo de un mes terminará de sacar todos los restos. «Ya habremos realizado el 70% de los trabajos», indicaron desde la compañía, que tiene la obligación de analizar y estudiar al menos el 10% de los restos encontrados. Además, esta previsto que construya una cripta para poder almacenar los restos debidamente.

Los trabajos en Tauste comenzaron a iniciativa de El Patiaz, que «recogió informaciones en el pueblo sobre la aparición de esqueletos que el conocimiento popular identificaba» como personas que fallecieron debido a «una posible epidemia de cólera en el siglo XIX, pero se observó que por sus características», con los cuerpos enterrados «del costado derecho y mirando a la Meca», se trataba de enterramientos islámicos y la primera cata realizada en el 2010 confirmó esta hipótesis. Todo ello trastocó la historia local en la localidad de las Cinco Villas demostrando la existencia de una gran población islámica antes de la reconquista de Alfonso I.

De hecho, los estudios que se han realizado hasta la fecha determinaron que una de las tumbas localizadas en esta necrópolis era la más antigua de las descubiertas en Aragón. Databa del periodo comprendido entre el año 714 y el 780, la fecha más antigua de un enterramiento islámico en toda la comunidad.

La asociación ha impulsado el estudio de los restos en diferentes ámbitos docentes y académicos. En la excavación realizada en el 2012 se encontró «un fragmento de cerámica de entre los siglos X y XII», algo «no habitual» porque el ritual de enterramiento «dice que no podían llevar ajuar». Actualmente, los restos hallados hasta la fecha se encuentran en el almacén del Museo de Zaragoza.