La Feria de Libro de Zaragoza celebró una segunda jornada repleta de actividades y talleres que estuvo respaldada por un número de visitantes inusitadamente elevado. A pesar de ubicarse en un día entre semana, esta jornada gozó de una afluencia fluida e ininterrumpida. Sergio Navarro, presidente de la Copeli (Comisión Permanente del Libro) se mostraba jubiloso por el balance «sorprendentemente positivo» de la feria. «Estamos viendo más gente que otros años, y lo más importante, más bolsas llenas de libros» dijo Navarro.
Ángel Gálvez, secretario de la feria, se atrevió a hacer previsiones: «Si el tiempo acompaña se prevé una cantidad de gente muy importante de cara al fin de semana» e hizo hincapié en los esfuerzos de los organizadores: «Este año tenemos menos días, pero no hemos renunciado a ninguna actividad, de modo que hemos tenido que quintuplicar los medios materiales y los medios humanos, solo espero que dada la densidad de actividades ningún visitante tenga incompatibilidad de horarios» apuntó el organizador.
La jornada reunió importantes eventos como la charla Seguimos sin ponernos el sombrero, impartida por las escritoras Carmen G. de la Cueva y Nuria Capdevilla Argüelles, o la presencia de Félix Teira con su última novela «El Último Sol».
EL PROTAGONISTA / Aunque si hubo un claro protagonista de esta jornada, fue el donostiarra Fernando Aramburu, que estuvo firmando ejemplares de su novela Patria de 19.00 a 20.00 horas, para posteriormente impartir una pequeña charla en la sala de exposiciones del ayuntamiento.
La presencia del escritor se hizo notar, ya que la caseta destinada a la firma de su libro comenzó a recibir gente media hora antes de la hora estipulada. María Castiella, una visitante de la feria, había realizado un trayecto de 23 kilómetros desde su pueblo para ver a Aramburu. Tomás Sanz, acérrimo seguidor del escritor, enseñaba orgulloso su ejemplar de Patria, recubierto con un forro casero de papel de embalar. «Se lo he dejado a todos mis familiares, está un poco desgastado» decía.
Por otro lado, Aramburu, que llegó a la feria unos minutos antes para poder recibir a la prensa, se mostró muy contento con la acogida de su libro. «Esto me demuestra que no he trabajado en vano» dijo el escritor, y añadió que «resulta reconfortante encontrarse con una estampa así, sobre todo teniendo en cuenta que otros años he estado dos horas sentado en una caseta y no ha venido nadie».
Aramburu llegaba a la Feria del libro de Zaragoza tras pasar por varios destinos, entre ellos Madrid, y donde el pasado fin de semana se dio un auténtico baño de masas tras cinco horas de firmas de libros el sábado y otras cinco el domingo. La convocatoria de seguidores del escritor en la capital solo fue superada por la youtuber Luna Dangelis, que aglutinó a un público adolescente. Otro de los destinos que visitó el escritor fue Sevilla, donde Aramburu acabó de firmar libros a las 23.45 de la noche.
Patria, publicada por Editorial Tusquets, ya va por la decimoctava edición, y ha vendido más de 400.00 ejemplares. La novela fue además la ganadora del Premio de la Crítica y del premio Francisco Umbral y ya se considera una pieza fundamental para entender la historia del terrorismo vasco durante la segunda mitad del siglo XX.
