INTERPRETES: Filarmónica de la BBC, Janine Jansen, Gianandrea Noseda

LUGAR: Sala Mozart del Auditorio

FECHA: Martes, 10 de febrero

ASISTENCIA: Lleno

La estrella del Auditorio, la Temporada de Primavera, inició ayer su décima edición. La sesión inaugural fue perfecta muestra de lo mucho que ha cambiado Zaragoza en la última década. Comenzar un ciclo así con Respighi, Britten y Stravinski ha dejado de ser un atrevimiento. El público hoy disfruta sinceramente (o eso parece) de músicas nada obvias.

La Orquesta de la BBC de Manchester regresó a la Sala Mozart con su nuevo titular, Gianandrea Noseda, una de las batutas más destacadas e interesantes de la nueva generación, un músico apasionado y genial que disfruta con su tarea y conjuga máxima precisión técnica con un talento innato por el sentido dramático en música.

La joven Janine Jansen fue solista, sencillamente magnífica, en el Concierto para violín de Britten, obra maestra del más grande de los compositores británicos (y eso es mucho decir, créanme) del siglo veinte. Jansen combinó, en dosis perfectas, energía, lirismo, belleza de timbre, delicadeza y nervio, dando tanta importancia al silencio como al sonido: la cadencia quitó el aliento y su reentrada en la Passacaglia fue inconmensurable. Noseda y su orquesta no anduvieron a la zaga en una obra de enormes exigencias instrumentales y anímicas que, espero, fue para muchos el descubrimiento de un mundo de emociones más allá de lo trillado.

Antes, las a ratos espectaculares y otros íntimas Fuentes de Roma de Respighi se regocijaban en un tono pictórico, que la orquesta aprovechó para lucir la riqueza de su sonido. Después, la circense Petrushka de Stravinski, sirvió para derrochar ritmo, descaro y drama. ¡Qué metales tiene esta orquesta! ¡Y qué gran director es Noseda! Dos propinas para acabar: el Tango de Albéniz en arreglo de Schedrin y la Danza rusa del Cascanueces de Chaikovski.