La corrida de toros que ayer se celebró en Las Ventas, duodécima de la Feria de San Isidro, tuvo que ser suspendida a la muerte del segundo toro al resultar los tres toreros heridos y no poder ninguno volver al ruedo para continuar la lidia. El peor parado fue David Mora, que fue arrollado por el primer toro cuando lo recibía a portagayola.

Mora fue operado en la enfermería de una cornada de 30 centímetros en el tercio medio cara interior del muslo izquierdo que arranca la vena femoral, de pronóstico muy grave. También le arrancó, asimismo, "las venas colaterales, además de contusionar la arteria femoral superficial" y le produjo otra herida de 10 centímetros en la axila izquierda, que alcanza el húmero".

Antonio Nazaré, por su parte, sufrió un golpe en la rodilla mientras ejecutaba un quite por chicuelinas al segundo toro, y, según fuentes médicas, padece una lesión de ligamentos.

Precisamente este segundo toro propinó hasta tres voltereras a Saúl Jiménez Fortes, en una de las cuales le caló en la pierna derecha, lo que dejó a los tres toreros indispuestos para continuar la lidia.