El conocido bailarín y coreógrafo Paul Taylor, considerado una de las mayores influencias de la danza moderna de las últimas seis décadas, murió el miércoles en Manhattan a los 88 años de edad. La defunción de Taylor fue confirmada por la portavoz de la Compañía de Danza Paul Taylor, Lisa Labarado, que apuntó a un fallo renal como causa del fallecimiento.

Nacido en Pittsburgh en 1930, el artista fue ya reconocido por su habilidad en la danza por su poderosa musculatura y su incisiva personalidad en la veintena, cuando bailó bajo las órdenes de Merce Cunningham, Martha Graham y George Balanchine. En los 60, comenzó a colaborar con Alex Katz, con quien continuó trabajando hasta 2014 y con quien creó algunas de sus piezas más excepcionales, como Sunset (1983) y Last look (1985).