A FAVOR

EL TRIUNFO DEL IMPREVISTO Habrá quien diga que, como todas las de Yorgos Lanthimos, es el tipo de película que de ningún modo genera consenso, y tendrá razón: se trata de una obra demasiado extraña, bizarra y cruel. Y el caso es que pese a ello La favorita le gusta prácticamente a todo aquel que la ve, quizá por la maestría con la que orquesta conflictos de clase y de género y de política y de alcoba. N. S.

EN CONTRA

RECREACIÓN DE AUTOR Puede ganar cualquiera de sus tres actrices, o incluso dos de ellas (Reisz y Stone compiten de forma fratricida en la misma categoría), y en los distintos apartados técnicos dada su cuidada recreación de la Inglaterra del siglo XVIII, pero la sensación es de que está producción anglosajona de Yorgos Lanthimos se ha colado con tantas estatuillas para cubrir la ración de cine más de autor, más personal e incordiante. Q. C.