Tras varios años de separación, la legendaria banda de Tolouse, Zebda, se reunió de nuevo en 2012 para grabar un nuevo disco, Second tour. Con un estilo renovado, pero con un espíritu que permanece, proponen la música como activismo. Esta noche, los franceses regresan a Pirineos Sur para protagonizar el último concierto de este año en Lanuza, a las 22.00 horas.

--Vuelven a Pirineos Sur después de muchos años, ¿qué recuerdos guardan de este festival?

--Los recuerdos de este festival son el hermoso paisaje inolvidable que se tiene con el lago y las montañas, pero también la energía del público...

--¿Cómo será el concierto de Pirineos Sur?

--Daremos lo mejor de nosotros para hacer del concierto una gran celebración con las canciones de Zebda y algunos temas nuevos.

--¿Se sienten la voz de la indignación?

--Enseguida nos dimos cuenta DE que poder hablar en público es un privilegio, así que lo aprovechamos.

--¿La música puede cambiar el mundo?

--La música acompaña la vida de las personas y son las personas las que hacen que el mundo cambie, no la música.

--¿Queda todavía mucho por cambiar?

--Siempre hay mucho que cambiar para la humanidad...

--¿Zebda es un grito en el desierto?

--No. Zebda no es un grito, un discurso o un mitin político, ¡es la música!

--¿Qué ha cambiado en Zebda en esta segunda etapa tras el reencuentro después de la separación?

--Estamos aún más cohesionados, y nos dimos cuenta de que ¡esto es para toda la vida!

--¿Creen que han abierto un camino en la música y la sociedad?

--Nosotros acompañamos a las personas que están escuchando la música con sus hijos y sus familias, y ahí jugamos nuestro rol de artista.