La caída de Mikel Albizu, Mikel Antza , y de su compañera Soledad Iparragirre, Anboto , deja a la dirección de ETA en manos de terroristas de segunda fila y sin otra estrategia que la de intentar devolver el golpe, según señalan fuentes de la lucha antiterrorista.

La lógica del escalafón etarra sitúa al lugarteniente de Antza , Peio Eskizabel, como nuevo responsable político de la organización. Eskizabel estuvo a punto de ser detenido a principios de este año y se ocupaba de misiones logísticas.

El nuevo jefe de comandos sería Garikoitz Aspiazu Rubina, Txeroki , un terrorista reclutado en las filas de la kale borroka al que se atribuye el asesinato del magistrado José María Lidón y que supuestamente desempeña esa responsabilidad tras la detención de Ibon Fernández Iradi, Susper , y de Gorka Palacios Alday, en diciembre pasado.

Como jefe de las finanzas, algunos medios colocan al histórico Angel María Iturbe Abasolo, y como responsable del aparato logístico, a Tomás Elorriaga Kunze, alias Teo , vinculado a Anboto y también al veterano Juan Cruz Maiza. Este sustituiría a Félix Esparza Lauri, arrestado en abril pasado junto con Félix Alberto López de Lacalle, Mobutu , y Mercedes Chivite. Como gran ideólogo en la reserva sigue José Antonio Urrutikoetxea, Josu Ternera .

Fue precisamente la documentación incautada a Esparza la que permitió confirmar la existencia de varias casas con depósitos de armas, allanadas por la policía el domingo en el sur de Francia, aunque la mayoría de ellas estaban siendo vigiladas desde hace cuatro años. Tras cinco meses sin que se registraran actividades sospechosas en las mismas, los responsables de la lucha antiterrorista decidieron "reventarlas" y ordenaron la redada simultánea del pasado domingo, en la que cayeron Antza y Anboto .

OPERACION POLICIAL Según medios policiales, el criterio empleado para ordenar la operación fue el de capturar al mayor número posible de implicados en la infraestructura etarra. De Antza se sabía que había vivido en París y había regresado al sur de Francia la primavera pasada. También existían indicios de que había utilizado alguna vez la casa de Saliers-de-Béarn en la que fue arrestado, y en la que ayer la policía se incautó de una potente fotocopiadora en la que imprimía el boletín Zutabe .

Sólo el domicilio del camionero Pedro Alcantarilla Mozota y su esposa, Lourdes Urdanpilleta, en la localidad de Urrugne, no había sido vigilado anteriormente por la policía. En un zulo de la vivienda se encontraron precursores de clorato y polvo de aluminio para fabricar bombas similares a las que estallaron en Asturias, Cantabria y Galicia este verano, y a las empleadas para intentar volar torretas eléctricas. En el zulo de Saint-Pierre-d´Irube, el más grande, se localizó una galería de tiro.

Fuentes francesas de la lucha antiterrorista señalaron que sus servicios de información y los de la Guardia Civil venían preparando la operación desde que en abril pasado descubrieron un taller de fabricación de armas en una granja de la localidad de Saint Michel, en el País Vasco francés. La desarticulación del aparato logístico se convirtió entonces en una prioridad, así como la detención del mencionado Elorriaga.

Este logró huir el pasado julio de un operativo conjunto de las policías española y francesa para desmantelar lo que queda del aparato logístico de ETA.

REESTRUCTURACION En la decisión de desmantelar esta infraestructura etarra también pesó la reforma de los servicios franceses de información, que les obligó a "cerrar" lo más rápido posible las investigaciones en curso, algunas de las cuales se desarrollaban desde hacía ocho años.