Por primera vez, los letrados del Congreso han dado su visto bueno a una comisión de investigación sobre Juan Carlos I y han recomendado que la Mesa de la Cámara baja la acepte a trámite. La iniciativa, presentada por Unidas Podemos junto con ERC, EH Bildu, Más País, Compromís, la CUP y el BNG, plantea indagar sobre el uso de tarjetas opacas por parte del rey emérito y algunos de sus familiares. Unos hechos posteriores a la abdicación del monarca y que, por lo tanto, no están protegidos por la inviolabilidad de su mandato.

Los morados registraron esta comisión -la sexta en los últimos tres años- a mediados de diciembre con la intención de esquivar el artículo 56.3 de la Constitución que establece la inviolabilidad del jefe de Estado y que había servido a los letrados de la Cámara para posicionarse en contra de las anteriores propuestas. Una recomendación a la que se agarraron PSOE, PP y Vox para votar en contra en las ocasiones anteriores. No obstante, en este caso Podemos y el resto de partidos republicanos y nacionalistas que han solicitado la comisión ponen el foco en las informaciones sobre el uso de tarjetas opacas por parte de Juan Carlos I entre 2016 y 2018.

Con el aval de los letrados, la Mesa del Congreso estudiará este miércoles la petición de tramitar la comisión de investigación. Todas las miradas estarán puesta en el PSOE ya que tendrán en su mano que la iniciativa pueda llegar hasta el Pleno y votarse o quede en nada. "Ya no hay excusa. A partir de ahora, la decisión es puramente política", avisó este martes el portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, a sus socios en el Gobierno que, hasta ahora, se amparaban en los informes desfavorables de los juristas de la Cámara baja.

De por vida

A esta tensión que arrastran los socios de coalición en torno a la monarquía desde hace meses se suma que el Gobierno confirmó que Juan Carlos I mantendrá el título de rey "vitaliciamente", como establece el real decreto aprobado en 2014 que reguló su abdicación. El Ejecutivo respondió de esta manera tan contundente a una pregunta por escrito formulada por el senador de Compromís, Carles Mulet, sobre si en Moncloa se está planteando la posibilidad de revocar este "título honorífico" al emérito.

En la respuesta del Gobierno se compara la situación del padre de Juan Carlos I, aunque "sin ánimo de exhaustividad" con la que se produce en otras monarquías como la de Bélgica, con el rey Alberto II; Luxemburgo, con el Gran Duque Juan; o Japón, con el emperador Akihito, quien recibe el nombre de Daijo Tenno o Joko.