La OTAN decidió ayer extender la zona de operaciones de su misión antiterrorista de vigilancia marítima, bautizada como Active Endevour (Esfuerzo Activo). En este operativo España participa con dos fragatas y una patrullera y, de momento, el Ministerio de Defensa no tiene previsto aumentar la contribución de la Armada a la misión.

Esta operación de control del tráfico mercante, emprendida tras los atentados del 11-S para vigilar embarcaciones con el fin de evitar acciones terroristas, estaba limitada al Mediterráneo oriental (principalmente al canal de Suez) y al estrecho de Gibraltar. Desde el inicio de la operación de vigilancia, han sido detenidos más de 41.000 buques y se han efectuado 47 visitas a bordo en el Mediterráneo oriental.

Sigue activo el artículo quinto del Tratado del Atlántico Norte, que prevé la defensa mutua de los aliados en caso de un ataque procedente del exterior contra algún miembro de la alianza.