Tres policías han negado esta mañana en la Audiencia Nacional haber ayudado a los miembros de la red de Gao Ping a cambio de regalos ante el juez Ismael Moreno. El defendor del presunto cabecilla de esta red, Jaime Sanz de Bremond, ha arremetido contra la fiscalía y ha negado el trato de favor de los policías.

El primero de los nueve agentes imputados en esta causa, el comisario Manuel Rodríguez se ha negado a declarar porque no se ha presentado su abogado. Los otros dos policías, Blas Donoso y Roberto Ruiz han negado haber favorecido a la red de blanqueo de capitales china. Ruiz Ortega fue subinspector de extranjería y ha admitido que dio cita a uno de los imputados en la trama china para agilizar su tarjeta de residencia porque había un hueco, pero ha rechazado que fuera a cambio de regalos.

Por su parte, Sanz de Bremond ha acusado a la fiscalía anticorrupción de manipular los hechos y ha asegurado que esta investigación es un "globo hinchado". Otros seis agentes comparecen mañana y el viernes, entre ellos el comisario de Barajas, Carlos Salamanca.

Este caso comenzó a ser instruido por el juez Fernando Andreu que se ha apartado del caso tras la imputación de los policías al ser amigo personal de Salamanca. Varios informes relacionan a estos agentes con regalos, viajes y entradas a partidos de fútbol que recibieron de la trama china a cambio de que les ayudaran a agilizar trámites. Esta relación se apoya en conversaciones telefónicas.