Unas 700 escuelas de primaria han sido bombardeadas durante los conflictos que ha sufrido Irak en los últimos años, y unas 2.700 necesitan rehabilitación. Así lo denunció ayer el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) en un informe divulgado en Ginebra.

El documento subraya que en Bagdad está la tercera parte de escuelas bombardeadas durante la ocupación y en anteriores guerras. Otras 200 escuelas de primaria fueron incendiadas y más de 3.000 fueron saqueadas en los diversos conflictos.