Osama bin Laden, líder de Al Qaeda, compareció por primera vez en dos años en un vídeo difundido por Al Jazira y leyó personalmente una carta al pueblo estadounidense en el que no sólo amenazó con cometer nuevos ataques masivos como el del 11-S, sino que también acusó al presidente George Bush de engañar a sus compatriotas y de haber agravado las consecuencias de los atentados contra las Torres Gemelas por no haber estado más alerta.

Desde Toledo (Ohio), Bush replicó: "EEUU no será intimidado. Estamos en guerra con los terroristas y estoy seguro de que la ganaremos".

"Nunca se nos hubiera ocurrido que el comandante en jefe del país Bush dejaría a 50.000 ciudadanos en las dos torres para que afrontasen solos esos horrores, porque pensó que era más importante escuchar a una niña hablando sobre sus cabras", declaró Bin Laden. El primer análisis de los servicios secretos concluyó que se trata, efectivamente, del líder espiritual de la red terrorista Al Qaeda y que está notablemente recuperado tras su supuesta huida de Tora Bora, en Afganistán.

APARIENCIA VIGOROSA El hombre más buscado del mundo habla con voz firme y serena, en el vídeo de 18 minutos, e incluso muestra vigor al señalar con el índice a la cámara para poner énfasis en diversos puntos de su discurso. En cambio, en el anterior vídeo, paseando por un sendero montañoso, el 10 de septiembre del año pasado, los expertos vieron que movía un brazo con dificultad.

"La seguridad del pueblo americano sic no está en las manos de John Kerry ni en las de Bush, ni en las de Al Qaeda", asevera Bin Laden con aplomo, en su primer mensaje en vídeo y en persona desde el 19 de mayo del 2002. "Pueblo estadounidense: vuestra seguridad está en vuestras propias manos. Vuestra seguridad depende de la política adoptada por vuestra Administración", continúa, dirigiéndose a los estadounidenses. "Las naciones que no nos ataquen no serán atacadas".

Bin Laden incluso explica las razones que le llevaron a organizar el 11-S, operación que dice haber ideado cuando vio cómo los aviones israelís bombardeaban edificios libaneses, en 1982, "cuando EEUU permitió a Israel invadir el Líbano".

Además, el líder de Al Qaeda ataca duramente a Bush, en un claro intento de influir en el resultado electoral, y asegura que no se trata de elegir a uno u otro candidatos a la Casa Blanca, sino de "cambiar la política represiva" de Washington en el mundo. "A pesar de entrar en el cuarto año después del 11-S, Bush está todavía engañándoos y ocultándoos la verdad, por lo que permanecen las razones para repetir lo que ocurrió" en los ataques que causaron más de 3.000 muertos en Nueva York, Washington y Pittsburgh.

CONMOCION El ominoso mensaje provocó conmoción nacional en EEUU, donde ambos candidatos cambiaron su campaña electoral.

Los especialistas empezaron a barajar hipótesis sobre cómo puede afectar esta bomba preelectoral en las presidenciales del 2 de noviembre. Por una parte, la directísima amenaza de un nuevo 11-S podría reforzar el apoyo a Bush, pues los votantes le ven más capacitado que a Kerry para afrontar el terrorismo.

Por la otra, el desafío del mayor enemigo de Estados Unidos pone en evidencia que el presidente ha sido incapaz de capturarlo o acabar con él en todo su primer mandato, lo que puede beneficiar al candidato demócrata.