China prevé rebajas arancelarias provisionales para más de 700 productos extranjeros a partir del comienzo de 2019, informa ete lunes el diario oficial 'Global Times'. Esta información, que cita al Ministerio de Finanzas, indica que se anularán los aranceles a productos como ingredientes para alimento de ganado, algunos tipos de medicamentos, baterías de iones de litio para 'vehículos de nuevas energías' o desechos sólidos como la escoria de manganeso. En cuanto a las reducciones, la gama de productos beneficiados pasa por motores para aeronaves, robots y "otros equipos avanzados".

Los aranceles provisionales son fijados por las autoridades para rebajar las barreras de entrada al mercado chino a algunos productos con base en una mayor demanda interna. El Ministerio también anunció que, a partir del 1 de julio del 2019, establecerá cláusulas de nación más favorecida -por las que las condiciones beneficiosas acordadas con un país se extienden al resto- a casi 300 productos de tecnología de la información.

La información no especifica si estas nuevas reglas a la importación afectan a productos provenientes de Estados Unidos, país con el que China mantiene una guerra comercial. Los presidentes de Estados Unidos, Donald Trump, y China, Xi Jinping, acordaron el pasado día 1 una tregua de 90 días, periodo en el que ambas partes deben cerrar un acuerdo comercial; en caso contrario, Estados Unidos seguirá adelante con su plan de aumentar del 10% al 25% los aranceles a productos chinos valorados en 200.000 millones de dólares.

La sesión bimestral del Comité Permanente de la Asamblea Nacional Popular (ANP, legislativo) debe revisar durante toda esta semana el nuevo marco legal para las importaciones y exportaciones, sobre empresas conjuntas de capital chino y extranjero, sobre empresas conjuntas sin capital, y sobre empresas de propiedad totalmente extranjera.

El borrador incide en que "China seguirá desarrollando y mejorando sus políticas de liberalización y facilitación de las inversiones extranjeras" con el fin de "crear un entorno estable, transparente y predecible", publicó la agencia estatal de noticias Xinhua.

La idea de la reforma legal es que "todas las partes de la inversión deben decidir las condiciones de la cooperación tecnológica respecto de la inversión extranjera a través de negociaciones" y que "ni los departamentos de gobierno ni los funcionarios pueden utilizar medios administrativos para obligar a transferencias tecnológicas". Ese espíritu se plasma en una señal del Ejecutivo chino de que quiere proteger los intereses de los inversores extranjeros, que pueden ser claves en el desarrollo económico de los próximos años, máxime en un contexto de creciente proteccionismo en EEUU. El proyecto de ley estipula que la propiedad intelectual de las empresas extranjeras estará protegida y que sus beneficios en China se podrán transferir libremente fuera del país.