Según fuentes oficiales citadas por varios medios estadounidenses, el Gobierno de Barack Obama baraja la posibilidad de lanzar comida y medicinas a los miles de iraquís pertenecientes a varias minorías religiosas que han tenido que huir de sus pueblos en el norte de Irak por el avance de las milicias del Estado Islámico, el antiguo ISIS. Tampoco se descarta un bombardeo contra las posiciones de los yihadistas, que han obligado a cerca de 40.000 personas a escapar con lo puesto y a refugiarse en las laderas del monte Sinjar. Unos 40 niños han muerto ya de deshidratación y golpes de calor, según Unicef.

"Podría producirse una catástrofe humanitaria", ha declarado al 'New York Times' una fuente de la Administración. La decisión, añadía, podría adoptarse "de forma inminente". Las especulaciones sobre una posible intervención estadounidense arrecian desde que Obama se reuniera esta mañana con sus asesores de seguridad nacional para estudiar el nuevo escenario creado en el norte de Irak después de que los yihadistas tomaran el fin de semana la localidad norteña de Sinjar, donde viven miles de yazidís, una minoría de origen kurdo a la que los fundamentalistas islámicos acusan de adorar al diablo. Algunas informaciones apuntan a que cientos de yazidís han sido ya asesinados.

La salvajes hordas del ISIS, que aparentemente se han apoderado de la mayor presa hidroeléctrica del país, también han tomado el control Qaraqosh. Este histórico enclave cristiano había servido hasta ahora de refugio para miles de cristianos de Mosul, que huyeron de la ciudad después de que el ISIS, escindido de Al Qaeda, les diera tres opciones drásticas: convertirse al islam, pagar un impuesto especial o morir a espada.

Ante la situación desesperada por la que atraviesan miles de personas, Francia ha solicitado una reunión extraordinaria del Consejo de Seguridad de la ONU. "Dada la gravedad de la situación --las primeras víctimas son civiles y minorías religiosas-- Francia ha solicitado una reunión urgente del Consejo de Seguridad para que la comunidad internacional pueda movilizarse para contrarrestar la amenaza terrorista en Irak y proteger a la población civil", aseguró el ministro de Exteriores galo, Laurent Fabius. La reunión esta misma tarde, hora de Nueva York.