Este es el texto de la nota de suicidio que escribió el jubilado griego Dimitris Christoulas, de 77 años, antes de pegarse un tiro en la sien en Atenas frente al edificio del Parlamento. La declaración comienza con una alusión al Gobierno heleno colaboracionista con los nazis encabezado por Giorgios Tsolakoglou para denunciar la sumisión del actual Ejecutivo de Lukás Papadimos a las presiones exteriores:

"El Gobierno de Tsolakoglou ha aniquilado toda posibilidad de supervivencia para mí, que se basaba en una respetable pensión que yo había pagado por mi cuenta (sin ayuda del Estado) durante 35 años."

"Dado que mi avanzada edad no me permite reaccionar de otra forma (aunque si un compatriota griego hubiera cogido un kalashnikov, yo le habría seguido), no veo otra solución que poner fin a mi vida de esta forma digna antes de tener que rebuscar comida entre la basura para poder subsistir."

"Creo que los jóvenes sin futuro tomarán algún día las armas y colgarán boca abajo a los traidores a este país en la plaza Syntagma, al igual que los italianos hicieron con Mussolini en 1945 (en la plaza de Poreto de Milán)".