La OTAN ha acordado reforzar "con urgencia" su defensa colectiva y el despliegue militar en los estados miembros bálticos y orientales como respuesta a la anexión de Crimea por parte de Rusia y a la elevada concentración de tropas de combate rusas en la frontera de Ucrania.
La Alianza Atlántica ha negado que se hubiera producido una reducción significativa de las 35.000 a 40.000 fuerzas militares rusas desplegadas a lo largo de la frontera oriental de Ucrania, en contra de los anuncios efectuados por Moscú. Esas fuerzas rusas incluyen fuerzas blindadas, tanques, unidades especiales y helicópteros de combate, han asegurado fuentes atlánticas. La OTAN, asimismo, ha decidido intensificar su cooperación militar con Ucrania y ayudar a las autoridades del país a mejorar su capacidad de defensa.
El Consejo de Ministros de Asuntos Exteriores de la Alianza Atlántica, reunido en Bruselas, ha encargado al comandante supremo aliado que prepare una serie de medidas para reforzar la defensa colectiva, la presencia militar y la protección de los países aliados más orientales, como Polonia, Rumanía y los países bálticos, extremadamente alarmados por la intervención rusa en Crimea y que temen por su seguridad.
Las medidas que preparará el mando militar aliado incluirán un reforzamiento de las patrullas aéreas en la zona de los países bálticos, la continuación de las misiones de vigilancia de los aviones-radar AWACS en la zona fronteriza con Ucrania y Rusia, la actualización de los planes de defensa de la OTAN en su zona oriental, la aceleración de la capacidad de intervención de la Fuerza de Reacción Rápida de la OTAN, el incremento de los planes de entrenamiento y ejercicios militares aliados en la zona y el posible despliegue de medios militares en los países aliados orientales "mientras sea necesario", según precisaron fuentes de la Alianza Atlántica.
