Un grupo de 20 hombres armados secuestró ayer, en pleno centro de Bagdad, a dos voluntarias italianas de una de las más conocidas ONG que operan en aquel país. Junto con ellas, se llevaron a dos jóvenes colaboradores iraquís.

Las dos cooperantes italianas se llaman Simona Torretta y Simona Pari, ambas tienen 29 años y trabajan para la organización humanitaria Un Puente para Bagdad. Los secuestradores irrumpieron en la sede de la organización armados hasta los dientes, golpearon a un guardia de seguridad y se llevaron a los rehenes a rastras.

Uno de los secuestrados iraquís es un estudiante de ingeniería que se llama Raad y se ignora por el momento la identidad de la cuarta secuestrada, una joven iraquí. Una quinta persona parece haber conseguido escapar.

Este nuevo secuestro ha provocado una gran conmoción en toda Italia, donde aún no se ha apagado la polémica por la actuación del Gobierno ante el secuestro del periodista Enzo Baldoni, que fue asesinado el pasado 26 de agosto por sus captores y cuyo cuerpo todavía no ha sido hallado.

"MOVERSE COMO FRANCIA" La oposición progresista, así como numerosas organizaciones civiles y religiosas han pedido que "se haga todo lo posible" para salvar a las dos cooperantes italianas. Varios políticos han instado al Gobierno a "moverse como ha hecho Francia" y los Verdes han pedido una sesión permanente del Parlamento.

El vicepresidente del Gobierno, Gianfranco Fini, se reunió a primera hora de la noche con los ministros de Interior, Exteriores y Defensa y con los jefes de todos los servicios secretos. El presidente del Gobierno, Silvio Berlusconi, llegó más tarde, ya que se encontraba en una de sus residencias insulares.

La comunidad iraquí en Italia emitió anoche un comunicado pidiendo "en nombre de Dios misericordioso y compasivo y en nombre de nuestra pobre y desesperada gente" que los secuestradores no hagan daño a los rehenes.

INCERTIDUMBRE EN FRANCIA Por otro lado, ante la persistente incertidumbre que pesa sobre la liberación de los dos periodistas franceses secuestrados, una delegación diplomática francesa en Irak se entrevistó de nuevo ayer con miembros del Comité de los Ulemas Musulmanes, la organización más representativa de los sunís iraquís.

"Hemos tratado con el embajador de Francia y el enviado especial del Gobierno francés del apoyo de Francia al mundo árabe y a Irak", comunicó Hatem al Zaid, miembro del Comité de Ulemas que en el pasado negoció la liberación de numerosos rehenes.