Sharif y Mxrgxn han unido sus fuerzas para sacar un disco en cómun, Pyramo, que sale a la venta el viernes y que presentarán el sábado en la Fnac, a partir de las 19.00 horas con entrada libre. Su posterior gira recalará en Las Armas el 28 de febrero.

-¿Cómo surge este paso delante de crear un proyecto juntos?

-Sharif: Era un paso natural, instintivo e intuitivo. Ya veníamos de girar juntos, habíamos compartido muchas horas en el coche y escenario y sobre todo una cantidad considerable de afinidades musicales, inquietudes artísticas y de sensibilidad.

-Mxrgxn: Para mí, en el fondo es algo natural. Y es cierto que no deja de ser una oportunidad increíble y por otro lado siento una pequeña responsabilidad, un pequeño miedo. Sharif tiene ya su carrera construida y estos cambios todos sabemos que no tienen por qué ir bien de cara al público.

-Acostumbrados a crear en solitario, ¿cómo ha sido el proceso de composición?

-S.: La parte inicial de las canciones ha sido algo divertidísimo y como un juego. Todo el proceso ha sido muy bonito pero para mí significativamente más el principio, el hecho de bajar al estudio y hacer canciones solo por jugar, por descubrir, por mezclar cosas, compartir canciones, ver que la otra persona las pilla y las redimensiona. He tenido sensaciones muy similares a las que tuve al principio con Tr3s monos, eso de que uno más uno no son dos sino mucho más.

-Es un disco musicalmente muy rico que se aleja de los cánones del rap.

-M.: Muchas veces el tener una carrera individual que funciona muchas veces te acota porque te da miedo romper esa especie de camino fácil. El hecho de juntarnos también permitía tener un motivo para cambiar un poco, para presentar un proyecto un poco diferente y desde el principio sabíamos que la excusa para juntarnos era atrevernos a cantar a implementar músicos e ir hacia esa forma de canción que escuchábamos de otros grupos en coche.

-Sharif nunca ha sido un rapero al uso pero este disco es un paso más, ¿era el momento?

-S.: Pienso que vivimos en unos tiempos que está convulsionando todo el rap, la música urbana se está convirtiendo en un fenómeno social. Cuando yo era crío y escuchaba rap yo era el bicho raro del instituto y hoy el bicho raro es el que no escucha rap, trap o reggaetón. Partiendo de ahí, creo que todos los artistas están empezando a perder perjuicios y miedos a hacer nuevas cosas y el público lo acepta. Es un nuevo público, una nueva generación de oyentes que no arrastran los estigmas de mi generación, vienen más puros y sin tantos prejuicios. Eso libera al artista, le permite perder ese miedo de perder una fórmula que funcionaba y que hacía que no te atrevieras a ir por otro lado.

-¿De dónde viene el nombre del disco, Pyramo

-M.: Viene después de tener las canciones. Cuando tenemos el disco nos paramos a estudiar las temáticas de las canciones para encontrar algo que reflejara el contenido. Y nos damos cuenta que siempre hemos hablado del amor y la muerte en nuestras canciones y en este disco seguimos dando la brasa con ese tema. Así que después de mucho pensar, aparece Pyramo que viene del mito de Pyramo y Tisbe, los Romeo y Julieta primigenios.

-¿Les obsesiona el amor y la muerte?

-S.: Entiendo que uno no elige sobre lo que escribe. Podría escribir sobre lo que quisiera pero no sé si me apetecería que luego la gente escuchara, lo único relevante y que oposita a la posteridad son las temáticas que no tienen fecha de caducidad. Toda la literatura que merece la pena va sobre el amor y la muerte, todas las canciones que nos han gustado en los últimos 50 años últimos hablan de esto y creo que va a seguir ocurriendo después de nosotros. No descubro nada si digo que todas nuestras canciones son las mismas, ya lo decía Fito y seguro que lo dijo alguien antes… Pasa con muchos artistas y géneros, que llevan haciendo la misma canción siempre. La humanidad en general toca siempre estos temas.

-¿Cómo va a ser traspasar el disco al directo, llevarán banda?

-J.: La idea es que sí, creemos que la banda en directo aporta una energía que sin ella no se puede acceder. Pero somos precavidos, de momento, tenemos conciertos con banda y los que no podamos iremos con el batería Antonio Torres y nuestro disc jockey Oskar. El objetivo es crecer lo suficiente para poder tocar en todas las ciudades con banda.

-S.: De momento, los conciertos de Madrid, Zaragoza y Barcelona los haremos con banda completa, teclista, guitarra y Antonio Torres a la batería y lo que sí es común a todos es que incorporamos a Antonio Torres de forma completa. Toca la batería, cuenta con dispositivos electrónicos que le permiten disparar muchos sonidos y, además, toca el teclado y canta.

-¿Cómo esperan el recibimiento del público?

-S.: Esperamos, de una manera humilde y sin ambición loca ni a cualquier precio, que crezca nuestra base de fans y de oyentes, que no perdamos los que teníamos y que consigamos fidelizar a gente nueva que a lo mejor el rap más canónico y ortodoxo les podía parecer menos atractivo por la propia estructura. Este disco que hemos hecho tiene el rap latente pero el envoltorio es más digerible y más cercano.

-J.: Y el directo es mucho más espectacular.