El Ayuntamiento de Gelsa terminó recientemente la segunda fase de una importe mejora en las infraestructuras de su pueblo, la renovación del sistema de alumbrado público. Y es que, con una antigüedad de más de 30 años, las continuas averías, la falta de potencia, el deterioro de las farolas, etc, habían sumido el casco urbano prácticamente en la oscuridad.
Así, la reforma ha supuesto un completo cambio de las instalaciones: tanto sistemas eléctricos, como transformador y farolas en el caso de las calles de mayor amplitud y faroles de menor tamaño para las vías más estrechas. La primera parte de los trabajos comenzó durante la anterior legislatura y supusieron una inversión total de 57.172 euros; esta segunda fase ha durado tres meses y ha tenido un coste total de 45.000 euros. Ahora queda pendiente una tercera parte de la reforma que comenzará a ejecutarse en breve y que supondrá una inversión de 86.000 euros.
Por otra parte, los continuos cortes en el suministro eléctrico que el municipio sufrió a lo largo del pasado invierno hicieron que el equipo municipal se reuniera con los responsables de ERZ para solicitar una solución a los problemas técnicos y al gran aumento de demanda energética que ha tenido lugar en Gelsa en los últimos años. La empresa se que comprometió a instalar un nuevo transformador subterráneo en el centro del pueblo, a través del cual se distribuirá una nueva red de abastecimiento, eliminándose además algunos de los postes.
Por otra parte el ayuntamiento ha tenido que enfrentar también nuevos problemas relacionados con el suministro de agua, aunque no de tanta gravedad como los vividos a lo largo del pasado verano. La nueva planta potabilizadora funciona perfectamente pero sus 1.000 metros cúbicos diarios de agua, aunque suficientes para el consumo de la población, no llegan a la hora de abastecer las cada vez más numerosas granjas ganaderas, por lo que se ha decidido acondicionar una de las viejas depuradoras para alcanzar un total de 2.200 metros cúbicos que solventarán el problema.
GLORIA ABADIA
