Los vecinos de Rosales del Canal siguen muy preocupados por la instalación de la sede de Remar en su barrio. Esta preocupación llegó al pleno de la Junta Municipal de Casablanca, donde se presentó una moción -a petición del PP- para su aprobación y debate al respecto. La misma fue aprobada por unanimidad en dicha sesión plenaria, celebrada el 23 de enero.

La moción reflejaba un episodio recientemente vivido en este proceso. Concretamente, el Ayuntamiento de Zaragoza ha accedido a hipotecar el solar en el que se va a instalar la sede de esta organización, ya que se podrá como aval para obtener la financiación bancaria necesaria para poder llevar a cabo las obras de un edificio "que rechazan los vecinos de Rosales del Canal y también el distrito de Casablanca", apunta la moción. Y todo en un tiempo récord. "El 18 de diciembre, Remar hizo la solicitud al consistorio para poner como aval el suelo en que se edifica su infraestructura, y el 23 de diciembre, el gobierno local se reúne y lo autoriza", explica Leticia Crespo, presidenta de la Junta Municipal de Casablanca. "El PSOE, en minoría, decidió que sí", puntualiza la edil. "Algo que no ha sentado bien, porque se ha hecho de forma discreta, sin hacer mucho ruido", apostilla Crespo. Por ello, el próximo 31 de enero "presentaremos en el pleno del Gobierno de la ciudad una moción para preguntar porqué se ha hecho así", afirma la concejal-presidenta.

Leticia Crespo señala, en relación a la "celeridad" con que se ha hecho este proceso, "que el resto de instituciones públicas siguieran el ejemplo y fueran tan rápidos para darnos respuestas", en alusión a la Delegación del Gobierno, "a la que se pidió que llevara a cabo una investigación, a través de la unidad destinada a sectas, para que determine si Remar está vinculada a alguna de ellas, o no". Desde la junta también se ha pedido "al Ministerio del Interior y al Gobierno de Aragón que hagan lo mismo", dice Crespo, otras acciones "también sin respuesta".

La moción presentada va más allá, ya que en ella se recuerda que "el acuerdo plenario de febrero de 2010 no contempla la ayuda financiera para la realización de la obra", es más, recalca que "en caso de no obtener autorización de cualquier índole, convirtiendo en inviable el proyecto, el Ayuntamiento de Zaragoza quedará exonerado de indemnización alguna por los gastos hasta el momento producidos, resolviéndose de facto el derecho de superficie y haciendo suyo el consistorio las mejoras y edificaciones habidas en el terreno".

PETICIONES

Con estos antecedentes, el pleno de la Junta Municipal de Casablanca se comprometió a solicitar a los servicios jurídicos municipales que analicen la posibilidad de revocar la cesión de la parcela en que se va a ubicar el centro de Remar, situada en Rosales del Canal, ante la falta de solvencia de la organización.

También se instó al Gobierno de Zaragoza a explicar por qué se ha dado tanta prisa en autorizar la hipoteca de casi 1,5 millones de euros sobre el suelo público. Ambas peticiones se canalizarán a través de la junta municipal, que en los próximos días las elevará a la autoridad competente para intentar solucionar un problema que genera el malestar de los vecinos de Rosales, quienes llevan años reclamando servicios públicos en su barrio.