Los brotes surgidos en municipios de cuatro comarcas aragonesas --tres en Huesca y una en Zaragoza-- no tienen por qué afectar a todo el territorio. Porque nada tienen que ver la zona de Caspe o Zaidín con el Sobrarbe, los valles occidentales o la Ribagorza. Es comprensible que haya inquietud entre los visitantes que han hecho su reserva para las vacaciones, pero es bueno que sepan que en Aragón el sector turístico en verano es tan esencial como el de la nieve en invierno, y los empresarios han sido y son los primeros interesados en implementar las medidas necesarias para ofrecer un servicio seguro a los visitantes. En ello han trabajado y siguen trabajando ahora, facilitando toda la información que requieren los clientes de fuera de la comunidad. Los sellos de seguridad que tanto Faratur como Turismo Verde están otorgando a los establecimientos que cumplen con los protocolos son una garantía.
