Las decisiones municipales pueden afectar a los dirigentes del Ayuntamiento de Zaragoza en su propia comunidad. Es el caso del vicealcalde, Fernando Gimeno, quien estos días se está encontrando en el ascensor de su propia casa una recogida de firmas en contra de la peatonalización de la calle Don Jaime I. Y es que vive en el entorno. El afectado se lo ha tomado con el humor que exige la democracia y la participación, más en la puerta de casa.