El castillo de Loarre cerró ayer sus puertas al público para convertirse en escenario de la próxima película del director británico Ridley Scott, El reino del cielo . El entorno de este impresionante conjunto histórico oscense será en las próximas semanas un poblado medieval en el que se recreará una particular aventura de cruzadas en la que intervendrán actores de primera categoría. Loarre no es hoy lo que era hace unos meses, y probablemente tampoco lo será en el futuro si se tiene buen tino a la hora de sacar partido a la proyección internacional que puede tener gracias a un filme de estas características. Ojalá.