El anuncio del Gobierno de que podría transferir más competencias a las administraciones locales para la lucha contra la violencia machista ha encontrado un apoyo en Aragón. El consistorio zaragozano aplaude la idea siempre que puedan contratar más personal, algo que ahora les veta el Estado. Tienen razón en el matiz porque, además el de Zaragoza ya viene prestando servicios para lo que le faculta la Ley de Capitalidad que otros no tienen.