El Plan Estratégico de Zaragoza y su Area de Influencia fue aprobado en 1998 con la unanimidad de los agentes sociales, económicos e institucionales zaragozanos. Seis años después, este documento se ha convertido en una herramienta imprescindible para nuestro futuro, no sólo porque define el modelo de ciudad y entorno que queremos para las próximas décadas y propone las actuaciones necesarias para conseguirlo, sino también porque constituye el embrión de numerosas iniciativas hoy en marcha que están contribuyendo a una transformación sin precedentes de la ciudad.

Además, Ebrópolis, la asociación sin ánimo de lucro que lo promueve, se ha convertido en un referente ciudadano, en un punto de encuentro de todos aquellos que, desde muy diversos ámbitos, quieren poner su granito de arena en la construcción de una ciudad cada día mejor. Así lo entienden los más de 200 socios integrantes de una asociación que constituye un auténtico espacio de consenso, un taller de ideas en el que por encima de todo prima la defensa de los intereses comunes.

Ebropólis cumple diez años de vida el próximo 18 de mayo y todos debemos felicitarnos. La Asociación es un innegable referente de todo cuanto se mueve en la ciudad y, como decía, su Plan Estratégico supone la base de partida de numerosos proyectos de futuro. Hay que recordar que ya desde sus inicios el Plan apostó, entre otras actuaciones, por la logística, la sostenibilidad medioambiental, la defensa de la huerta zaragozana o el impulso de las nuevas tecnologías.

CONSIDERAMOS que esta simbólica fecha en la que cumplimos nuestra primera década de vida debe servir como punto de inflexión del proyecto. Nos encontramos en un momento decisivo, trascendental, para Zaragoza y su entorno, con una transformación en marcha de gran envergadura, de la que existen escasos precedentes, y unas perspectivas aún más halagüeñas.

Por esta razón, en la actualidad, a medio camino de la fecha fijada para su implantación --2010--, creemos que es el momento idóneo para revisar las propuestas del Plan Estratégico. Pretendemos pararnos brevemente a reflexionar, conocer qué ha pasado y, con ojos más actuales, revisar sus 140 acciones para cerrar las ya conseguidas, reorientar las superadas por las circunstancias y proponer todas aquellas actuaciones que resulten de interés por su carácter novedoso o estratégico.

Este proceso de actualización volverá a estar marcado por los principios que han guiado la actuación de Ebrópolis en la última década y que configuran uno de sus grandes valores, como son el consenso, la participación sin exclusión y la cooperación público-privada.

La revisión del Plan Estratégico ha comenzado con la evaluación de su grado de ejecución. Y comprobamos con satisfacción que ya ha dado sus frutos, puesto que la mitad de las acciones propuestas son hoy una realidad o están camino de serlo.

A lo largo de esta primavera hemos convocado además a la sociedad zaragozana a un ciclo de conferencias-debate en la que numerosos expertos de muy diversos sectores nos realizan una completa radiografía de la situación actual y de las perspectivas de futuro, dividida en siete grandes bloques temáticos y complementada con dos análisis externos.

LA PRIMERA de estas sesiones públicas de debate tuvo lugar el pasado miércoles, día 28, bajo el título Espacio integrado. Dada la importancia que concedemos a las relaciones de Zaragoza con los municipios de su entorno, hemos querido comenzar abordando este asunto, complejo y con múltiples vertientes, pero en el que sin duda unos y otros debemos caminar de la mano.

Desde Ebrópolis volvemos a apostar por la participación ciudadana, razón por la cual, de forma paralela a lo anterior, pondremos en marcha un completo sistema de recogida de opinión y abriremos en la web de la Asociación (www.ebropolis.es) una ventana a la participación, en la que los zaragozanos podrán expresar sus preocupaciones y sus sueños de futuro para Zaragoza y su entorno. A partir del otoño, unas comisiones estratégicas se encargarán de poner en orden toda la valiosa documentación que se obtenga y adaptar las propuestas a la realidad de una ciudad que se mueve a gran velocidad.

No quiero terminar sin resaltar que en esta nueva etapa que ahora emprende Ebrópolis contamos con un aval y un apoyo inmejorable: el de nuestros socios --un total de 236-- y el de decenas de profesionales que colaboran desinteresadamente con nosotros, representantes de un amplio abanico de sectores de la sociedad, y que con su esfuerzo y colaboración contribuyen a nuestro principal objetivo: propiciar que Zaragoza y su entorno avancen día a día entre todos.

*Vicepresidente de Ebrópolis