La DGA limita a un problema medioambiental y no de salud pública el súbito hallazgo de índices de lindano por encima de lo recomendable en municipios de la ribera del Gállego entre el pantano de la Peña y Villanueva, pero lo cierto es que la preocupación crece y la administración debe ofrecer respuestas y explicaciones. Acaso por ello, horas más tarde de que el consejero Lobón intentara tranquilizar a los afectados con un lacónico discurso en las Cortes, la DGA convocó a los 23 ayuntamientos a un reunión con el propio titular de Medio Ambiente y con los de Sanidad y de Interior, Ricardo Oliván y Antonio Suárez. En un caso así más alarma el silencio que la verdad, por lo que urge conocer qué medidas piensa tomar la administración, además de los desembalses decretados por la CHE, para devolver la normalidad a la ribera
