En Comisiones Obreras de Aragón no han descansado ni en Navidad. Desde que el secretario general, Enrique Tordesillas, anunciara que no se presentaría a la reelección, las luchas intestinas que se mantienen desde hace años volvieron a aflorar y hoy se hará efectiva la presentación de un nuevo candidato para enfrentar al de la actual dirección. Paulino Martínez, de la Federación del Metal, parece reunir a la mayoría del sindicato, mientras que el oficialista Julián Buey, no la alcanzaría. Aragón precisa de un sindicalismo fuerte y estas pugnas no benefician. Y lo malo es que ni los congresos de Madrid ni de Zaragoza cerrarán heridas.