La Policía Nacional interceptó a un hombre de 65 años que llevaba en un doble fondo de su peluquín medio kilo de cocaína. Los hechos ocurrían a finales de junio en el aeropuerto de Barcelona-El Prat, cuando el detenido, de nacionalidad colombiana, llegaba de un vuelo procedente de Bogotá.
A los policías les llamó la atención su estado de nerviosismo y fue el tamaño de su peluquín lo que les hizo sospechar que podía ocultar algún tipo de sustancia ilegal debajo, pese a que llevaba un sombrero para disimular. Efectivamente, llevaba un paquete de cocaína precintado adherido a la cabeza. Fue detenido por un delito contra la salud pública y puesto a disposición judicial. El valor de la droga, en función de la pureza y el corte, puede superar los 30.000 euros.
