La jornada de ayer en Cádiz rompió todas las estadísticas. Las aguas del Estrecho de Gibraltar registraron la mayor oleada de pateras de la que se tiene constancia. Fueron rescatados 835 inmigrantes a bordo de 92 balsas hinchables, que se suman a los 380 interceptados desde el domingo en el litoral peninsular, la mayoría también en aguas gaditanas. Los subsaharianos lo intentaron ayer también por tierra. Unas 900 personas trataron de saltar la valla fronteriza de Melilla, aunque solo 80 consiguieron entrar.

No fue el de ayer un episodio aislado sino la espectacular confirmación por mar de un repunte de la llegada de sin papeles a España, que hasta ahora se había producido sobre todo por la valla de Melilla. Fuentes de la Agencia Europea de Control de Fronteras (Frontex) explicaron a este diario que en el primer semestre de este año la llegada de inmigrantes irregulares a territorio español aumentó el 32% con respecto al mismo periodo del 2013. Según las mismas fuentes, hasta el pasado junio entraron de forma ilegal 3.330 inmigrantes, por 2.523 contabilizados en los mismos meses del 2013. Unas cifras empequeñecidas por los datos de Frontex sobre Italia. Allí el incremento detectado asciende al 506%, con 86.000 inmigrantes llegados a territorio italiano.

En España, los movimientos migratorios siguen concentrados en las costas andaluzas y, en menor medida, en las islas Cana-