Miles de personas se manifestaron ayer en varias ciudades europeas en favor del barco de salvamento marítimo Aquarius y para pedir que algún país acceda a darle su bandera para que pueda seguir rescatando a inmigrantes y refugiados en el Mediterráneo. La organización SOS Mediterranée -una de las dos oenegés que fleta el barco junto a Médicos Sin Fronteras- señaló que hubo movilizaciones en 57 ciudades de toda Europa, especialmente en Francia. Las mayores concentraciones en este país tuvieron lugar en Marsella (sureste de Francia), donde se halla amarrado el barco desde que Panamá anunció que le retiraba el pabellón, en Montpellier (sur) y en París. En la plaza de la República de la capital francesa, más de un millar de personas enarbolaron pancartas en favor del barco y cantaron eslóganes críticos con el Gobierno del presidente Emmanuel Macron. «Salvad el salvamento» o «Europa: la inacción es criminal», fueron algunos de los carteles que empuñaban los manifestantes, vestidos en su mayoría de naranja. El jueves, SOS Mediterranée reiteró el llamamiento a los gobiernos europeos «para que nos permitan continuar nuestra misión y lanzó una campaña internacional para que algún país les conceda su bandera con la que poder navegar después de que se la retirara Panamá, según la versión de las dos oenegés.