LA AGENCIA ESPACIAL Europea (ESA) ha demostrado que estas olas capaces de hundir grandes buques, "no son un mito", sino que existen, como se desprende de los resultados obtenidos gracias a los satélites ERS. La ESA informó que ahora ha centrado su investigación en el origen de este peligroso fenómeno, que se produce en la corriente de Agulhas, en la costa oriental de Suráfrica, y en la corriente del Golfo, en el Atlántico Norte.