Los familiares de las víctimas del Yak-42 no se conforman con dinero, ni con afirmaciones de que la tragedia ocurrida hace un año se debió a "un error humano" sin "malicia", como lo ha calificado recientemente el ministro de Defensa, José Bono. Los afectados exigen conocer la verdad y aseguran que van a seguir adelante con todos los procedimientos que ya están en marcha.

Estas son las manifestaciones de algunos familiares sobre la propuesta que hace Defensa de ofrecer compensaciones económicas a cambio de retirar las acciones legales iniciadas en España. "No buscamos dinero, sólo justicia. Nuestra máxima prioridad es saber qué pasó y las pruebas de ADN son sólo el primer paso", sentenció Ana Ochoa, viuda de hecho del sargento primero Miguel Angel Algaba. Más crítica fue la hermana del cabo David García, Noelia, quien señaló que esos test responden a "intereses políticos".

En relación a las declaraciones realizadas por José Bono respecto a que no "alentará ni exculpará" a los responsables de esta tragedia, Ana Ochoa pidió al ministro "una mayor implicación". Lo mismo que Rosario Benítez, quien también perdió a su marido en el accidente.

Según recordaron los familiares, el PSOE se comprometió en su programa electoral a solicitar una comisión de investigación que ahora ha negado. "El Gobierno debería poner en marcha esa comisión, el partido socialista tiene que cumplir con sus promesas. Los culpables deben comparecer en el Parlamento y explicar lo ocurrido. Todos nos lo merecemos. Mi marido no vale ni tres ni diez millones", sentenció Benítez, quien adelantó que tras conocer los resultados de las pruebas de ADN volverán a pedir la creación de una comisión de investigación.

Que el siniestro se hubiera producido por un "error humano" sin "dolo" no convence a los afectados. Según sus declaraciones, si hubo "negligencia", los responsables deben "pagar las consecuencias". "Me gustaría pensar que no hubo malicia, pero alguien ha participado en este entuerto y debe hacerlo público", concluyó Francisco Cardona, padre del sargento Francisco.