Fraga vive con una mezcla de estupefacción y rabia el descubrimiento de los vertidos tóxicos procedentes de una peletera de Igualada efectuados durante meses en La Terraza de Dios, una zona de secano próxima al vertedero comarcal.

Sebastián, que atiende la barra de un bar del paseo Segoñé se pregunta "¿qué me va a parecer? Mal. No se puede andar por ahí tirando residuos tóxicos. Hay que llevarlos a lugares donde se puedan reciclar, como hacemos nosotros con el aceite de la freidora", dice. Los parroquianos coinciden con el barman. "No me parece mal. Me parece peor. Y me da igual que sean 200.000 litros, trescientos o uno. Es lo mismo", anota Iván, un fragatino recién llegado a la capital bajocinqueña tras un año en Burgos.

Las autoridades también están indignadas. El presidente comarcal, José Evaristo Cabistañ (PSOE), se muestra cauto. Espera al cierre de la investigación. Pero es tajante. "Si se confirma que existen los vertidos sería una situación asombrosa: una barbaridad", dice.

El alcalde, Vicente Juan (PSOE), explica que "hay empresas que, por desaprensivas, no merecen ser empresas. No les importa intoxicar". Pide mano dura: "Tiene que haber un buen escarmiento. Esto es algo totalmente prohibido y la ley debe ser lo más dura posible con los responsables". También solicita colaboración para evitar episodios similares. "Entre todos hemos de evitar que casos así se vuelvan a repetir. Los campos son muy amplios y cualquiera puede tirar residuos. Entre todos debemos salvaguardar actos como éste. Debemos convertirnos en vigilantes del territorio".

Aluvial del Ebro

El alcalde, que también espera a la conclusión de las investigaciones abiertas para determinar el grado de afeccción de la zona y las medidas que se deban tomar para regenerarla, coincide con Cabistañ en esperar que los acuíferos del aluvial del Ebro, cuyo cauce se encuentra a escasos kilómetros, no hayan resultado afectados. Ambos indican que bajo La Terraza de Dios no hay acuíferos ni pozos.

Sin embargo, grupos ecologistas y veteranos conservacionistas alertan del riesgo de que los residuos lleguen al Ebro por la existencia en la zona de barrancos cuya escorrentía va a parar al Ebro. Miembros de grupos ecologistas aragoneses, que consideraron "muy grave que esto siga pasando", se inclinaron por esperar al cierre de las diligencias para decidir si se personan en la causa judicial abierta en Igualada, aunque ésta podría trasladarse al juzgado de Fraga.

Dos agricultores de La Terraza de Dios explican que "hace ocho o nueve meses" vieron por la zona movimientos de camiones que les llamaron la atención. Uno de ellos "estuvo una semana parado en un camino con unos depósitos llenos de polvo blanco que, ahora que sabemos esto, pues pensamos que igual era abono o igual no".

María Dolores pasea por el lluvioso Segoñé con su hijo. "Hace falta más regulación con los residuos. Tiene que caerles todo el peso de la ley", dice. Y sentencia: "Si persiguen a los fumadores, ¿qué hay que hacer con éstos?"