El presidente de Aragón, Javier Lambán, expresó ayer su respeto a la manifestación que congregó ayer en Teruel a miles de personas para exigir «un trato de igualdad» en materia de sanidad, pero ha descartado que hubiera «motivaciones reales» para la movilización. Lambán explicó que la sanidad de Teruel «no es mejor ni peor que la de Zaragoza o Huesca, y tiene los mismos problemas que en el resto de la España interior». Tras subrayar que en su Gobierno no necesitan «que ninguna asociación o entidad» les recuerde lo que tienen que hacer», el responsable autonómico reprochó a la organización convocante, Teruel Existe, de querer «hacernos recordar s»lo a nosotros y no ocuparse de recordárselo al PP».

Lambán destacó que en la actual legislatura su Ejecutivo ha invertido en el hospital de Teruel 3,6 millones en tecnología sanitaria, mientras que en la anterior, el Gobierno del PP solo invirtió 600.000, por lo que calificó de «incomprensible» la movilización de ayer. El presidente aragonés aseguró, además, que no tenía «mucho sentido» que se produjera una manifestación un día después de anunciarse desde el Ejecutivo autónomo la firma, el 25 de febrero, del acta de inicio de las obras del nuevo hospital.

A su juicio, «cada cual es libre de manifestarse, y lo respeto, pero me parece que motivaciones reales para esa movilización no había ninguna, sobre todo cuando el anterior gobierno no hizo nada, mantuvo paralizado el proyecto del hospital, no invirtió y se desentendió de los profesionales médicos». Recordó que la decisión del Gobierno del PP de jubilar a los médicos a partir de los 65 años, en un momento de falta de profesionales, costará a las arcas autonómicas 32 millones de euros al considerarse «ilegal».