El calor aprieta, el asfalto asfixia y quien más, quien menos, y siempre que las cuentas salgan, ya está pensando en huir de la rutina y regalarse unos días de descanso. Dominan los planes de última hora. Más aún desde que es posible contratar vacaciones a golpe de clic y que se apura buscando la gran oferta.

Con todo, el turista aragonés sigue eligiendo mayoritariamente el reecontrarse con el mar y sin salir de la Península. Priman los destinos cercanos y los desplazamientos cómodos. Las playas de la Costa Dorada siguen siendo referencia. "El turismo aragonés es fantástico. Llevamos ya mucho tiempo trabajando con ellos y en muchos casos ya no los consideramos turistas porque ya son vecinos nuestros, tienen aquí su segunda residencia", recuerda Josep Graset, presidente de la Associació d'Apartaments Turístics Costa Daurada, quien reconoce el doble valor de las visitas de los vecinos.

"El turismo de cercanía sigue siendo muy importante. Es el más fiel y además te vende bien. Este año las sensaciones que tenemos son similares a las de 2013. Confiamos en compensar el pinchazo del turismo ruso con el aumento de las visitas del interior", vaticina Graset.

LA COSTA ANDALUZA Pero el otrora reinado indiscutible de la Costa Dorada (y Cataluña por extensión), ha menguado entre los aragoneses en beneficio de la costa andaluza (por la conexión de AVE) y la Comunidad Valenciana. Renfe sigue ganando mercado y para este verano oferta 250.000 plazas en trenes hacia el sur, y otras 600.000 en las conexiones con Camp de Tarragona, Barcelona y Madrid.

Quienes optan por las islas, exprimen la opción que brinda el aeropuerto de Zaragoza de volar a bajo coste a Lanzarote. Quienes huyen del bullicio de la playa o adoran la naturaleza y el aire puro, tienen a un paso los valles del Pirineo y la tranquilidad de los parajes de Teruel.

En el Bajo Aragón se respira optimismo tras el notable crecimiento de visitantes hasta el mes de mayo (un 11,61% más): "Somos optimistas y esperamos que este año sea igual o superior al pasado. Los meses de julio y agosto se espera poder alcanzar el 100% de ocupación durante los fines de semana, tanto en la ciudad, como en las comarcas más turísticas de la provincia. Además, la llegada de visitantes extranjeros va creciendo, por lo que esperamos que siga esa tendencia también este verano", dicen en la Asociación provincial Teruel Empresarios Turísticos.

En la provincia de Huesca, La costumbre de las reservas a última hora y las previsiones del tiempo hacen que todavía sea pronto para aventurarse con las previsiones: "Aquí decimos siempre que hasta que no pasa San Fermín, a mediados de julio, esto no se mueve", explica Anabel Costas, responsable de turismo de la Asociación de empresarios de los Pirineos Alto Gállego. En el valle, que ahora promociona el lechal tensino, están notando el auge del turismo extranjero: "Es importantísimo ir a las ferias. Hay australianos que nos utilizan como punto intermedio en su recorrido entre Cataluña y el País Vasco y ahora hay un turoperador alemán que está trayendo alemanes nueve días a los Pirineos, tres días en cada valle". cuenta Costas.

Pedro Marco, de la Asociación de Empresarios de la Jacetania, confía en que los mensajes de mejoría se traduzcan en resultados: "Sí notamos más movimiento que el año pasado, pero sabemos que tras una crisis económica cuenta mucho tiempo recuperarse".