Acabar con el predominio de los hombres en determinados campos del periodismo, en particular la dirección y las páginas de opinión, ese es el objetivo que ayer se marcaron las periodistas, escritoras y articulistas que participaron en dos debates sobre la información en la jornada de clausura de las jornadas feministas.
Las más veteranas, como la corresponsal María Rosa Calaf y la directora de El País, Soledad Gallego Díaz, describieron sus difíciles comienzos en los medios, cuando ser una reportera era «una cosa exótica», según Calaf, que denunció la «condescendencia» con que era tratada en sus comienzos en la profesión.
Gallego Díaz señaló que las periodistas se estancaron durante muchos años «en los cargos intermedios» y abogó por conquistar ahora los consejos editoriales y las páginas de opinión, últimos reductos de los hombres.
Por su parte, la escritora y articulista Almudena Grandes criticó que en la literatura la mujer represente una mirada particular, mientras que la «voz universal» la asumen los escritores.
Y Ana Pardo Vera, directora de Público, señaló que solo el 15% de los puestos directivos son ocupados por mujeres en España. En cuanto a la periodista Pepa Bueno, relató que los casos de violencia machista se han ido abriendo paso poco a poco en los medios e incidió en que los despachos los copan los hombres.
