En cuanto el Boletín Oficial del Estado publique el decreto de convocatoria de elecciones, los partidos tendrán poco más de dos semanas para presentar sus candidaturas a las Cortes Generales y el Senado. Con los plazos tan apurados, esta fecha límite será en torno al 16 de marzo.

En Zaragoza se esperan pocas sorpresas y pocas caras nuevas. Hay poco margen de tiempo para abrir procesos internos y todos los partidos tienen la capacidad suficiente para configurar una lista -más corta que las de las Cortes o los municipios, al tener solamente siete nombres- que además deja hueco para aquellos responsables políticos que tienen una trayectoria más dilatada en el ámbito estatal que en el autonómico.

De momento, la única novedad entre los cuatro partidos que actualmente tienen representación por esta provincia sería Pablo Echenique, quien hace cuatro años encabezó la candidatura a las Cortes de Aragón y tras su salto a la política nacional como secretario de organización de Podemos, aspira a entrar en el Congreso de los Diputados como cabeza de lista de Unidos Podemos tras haber ganado las primarias de la formación morada. Eso, salvo sorpresa mayúscula y a la espera de que se cierre definitivamente la confluencia con otras formaciones como Izquierda Unida, y se configure una candidatura unitaria. El tiempo corre para que eso se produzca.

Por lo demás, pocas novedades, aunque ningún partido ha tomado ninguna decisión y nadie se ha postulado. Es demasiado prematuro. En cualquier caso, todo apunta a que Eloy Suárez volvería a encabezar la candidatura del PP por la provincia de Zaragoza.

Susana Sumelzo tiene todas las opciones para repetir por el PSOE, al igual que Rodrigo Gómez por Ciudadanos. En cualquier caso, todo depende de la convocatoria de reunión de los órganos de ambos partidos.

Más incierta es la situación en los dos partidos aragonesistas, CHA y PAR. La cercanía de esta cita electoral con la autonónica y municipal, que es en la que realmente se volcarán porque es donde más tienen en juego, les obliga a participar de alguna manera para no quedarse fuera del foco mediático y poder intervenir en el debate.

En los dos casos, todo queda pendiente de que sus órganos decidan la forma y el cómo concurrir a estas elecciones. Y ahí entran en juego diversas opciones. CHA, que no se presentó hace cuatro años, podría hacerlo esta vez en solitario, aunque también podría explorar algún acuerdo con alguna otra formación progresista. Por su parte, lo más probable es que el PAR se decante por reeditar su acuerdo con el PP.