Podemos-Equo considera que el acuerdo de bases programáticas anunciado ayer entre PSOE y PAR es «una llamada desesperada a Ciudadanos» antes de la constitución de los ayuntamientos, mañana, con el objetivo de que la formación naranja vea posible un acuerdo con esta coalición y haya así posibilidades de que los socialistas ganen alguna alcaldía en las tres capitales aragonesas, a priori perdidas por los avanzados acuerdos entre Cs y el PP.

La formación morada, por su parte, se reunirá el lunes con el PSOE (y se supone que con el PAR, ya que desde ahora negociarán conjuntamente) para abordar una posible investidura o un improbable pacto de Gobierno. Escartín sostenía en los últimos días que la opción era un pacto de izquierdas facilitado por el PAR a través de una abstención en la investidura. Pero el secretario general del PSOE, Javier Lambán, descartó por completo ayer que tal circunstancia pueda producirse, porque los aragonesistas estarán en el Gobierno sea quien sea el partido que lo acabe integrando.

En cualquier caso, será la Asamblea Ciudadana de Podemos la que ratifique el acuerdo que se alcance, si lo hay. Y no valoran el contenido del acuerdo hasta que no haya propuestas definitivas.

Respecto a la constitución de ayuntamientos, la formación morada considera que se definirán en pactos «intercambiados como si fueran cromos desde Madrid, por parte de PP, Cs y Vox».

Por ello, una vez superada esta etapa municipal, el lunes se proponen hablar «de verdad» de lo que necesitan los aragoneses y de cómo se puede hacer para logar una mayoría «que frene a las derechas del Trío de Colón», en referencia a PP, Cs y Vox. «Aquí el PAR deberá definir si prefiere seguir de la mano del PSOE para favorecer un gobierno progresista o volver a la foto de Colón», insistieron en la formación morada.

De hecho, esta insistencia motivó que ayer el presidente del PAR, Arturo Aliaga, afirmase durante su comparecencia con Lambán que iría a hacerse esa foto de nuevo. «Si hay que volver a Colón iré, a defender la unidad de España y un igual nivel competencial para las autonomías. Yo estuve, y también destacados dirigentes socialistas», añadió. «Adonde no me verán ir es a las cárceles, a visitar a nadie antes de que se juzgue el procès, ni a manifestarme a Barcelona para que aumenten el caudal ecológico del Ebro y quitar agua a los regantes del Alto Aragón», zanjó.