La presidenta de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, visitó ayer la capilla ardiente del expresidente del Gobierno de España Adolfo Suárez, instalada en el Congreso de los Diputados.

Rudi transmitió su pésame a la familia y las condolencias del resto del Ejecutivo autonómico y de toda la sociedad aragonesa, informaron fuentes del Gobierno aragonés.

Según la presidenta de Aragón, Suárez fue "un gran hombre de Estado y un patriota, con un gran amor por España". Y propuso que "el momento actual es el idóneo para que las generaciones que no vivieron la Transición conozcan lo que se hizo en aquella época por parte de los españoles".