Zaragoza en Común (ZeC) e Izquierda Unida, partido que forma parte de la confluencia en la capital aragonesa, despidieron ayer la campaña electoral por separado. Los primeros desde la plaza del Pilar y los segundos, en el centro cultural El Molino, de Utebo. Ambos ponían fin a dos semanas de mítines y apuestas programáticas y apelando al voto de la izquierda. En el caso del alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, se dirigía a los indecisos para pedir el apoyo que acabe con el «cortijo para los de siempre». Mientras, el candidato de IU a la Presidencia de Aragón, Álvaro Sanz, aprovechó el último día para prometer el impulso al Cercanías y, por la mañana, un plan de empleo para parados que lleven dos años en situación en desempleo. Este pedía recuperar «la dignidad de la gente sencilla» en las urnas mañana, a través de su partido, que es el único, dijo, que fomenta un Aragón «feminista, sostenible, productivo y con derechos».

Para Sanz, IU es la «única» alternativa que garantiza «un Aragón vertebrado gobernado por una izquierda capaz, valiente y que no se resigne». «IU es la única garantía de la izquierda real, transformadora, que tiene rostro, que está en los problemas y en los conflictos y que desde luego es la izquierda que conoce de primera mano cuáles son las soluciones para mejorar las condiciones de vida de esa mayoría social que hoy en Aragón lo está pasando mal», apostilló. Un cambio en la sociedad que solo se logrará «a través del feminismo real».

Ambos, Santisteve y Sanz, confían en que la izquierda salga victoriosa en los comicios autonómicos y municipales de mañana porque «hay que parar los pies a esa derecha reaccionaria que quiere acabar con todo», aseguró el candidato a la Presidencia de Aragón.

CONFIANZA

«ZeC os necesita», le dijo Santisteve a quienes todavía no han decidido su voto en Zaragoza, «la ciudad cuenta con vosotros». En su caso, apeló al esfuerzo realizado estos últimos cuatro años y a que no puede quedar «en balde» si no vuelve a gobernar la confluencia. En la carpa instalada junto a la Plaza del Pilar, en un ambiente animado y vitoreado y aplaudido por miembros de su lista y simpatizantes, hizo un repaso a la legislatura que ahora concluye. «Somos la única candidatura con una base social y una pulsión vitalpor recuperar el ánimo y porque somos conscientes de que los tiempos que vienen son complicados, pero solo desde el trabajo en los barrios, la inteligencia colectiva y la colaboración y crear ciudad juntos se puede revertir esta situación», proclamó en el cierre de campaña.

«No se puede echar por tierra el trabajo de estos cuatro años y no se puede entregar la ciudad a quienes la han usado como un corralito particular», añadió, para autodefinirse como una apuesta «valiente, firme y que ha defendido a los zaragozanos» y pedir el voto a quien está indeciso o no sabe a qué fuerza progresista respaldar este 26-M. «Hemos sido esperanza para toda esa gente corriente», apostilló.

Para Santisteve, su candidatura es la de los barrios, en la que dijo haber enraizado su base, porque ZeC procede de ellos. Por ello se reconoció con «capacidad plena» para revalidar el Gobierno de la ciudad. Y, en este sentido, añadió que el ambiente que se ha vivido en estas dos semana en la carpa de la plaza del Pilar es «muy buena señal».

Sanz, por su parte, también aprovechó para lanzar una última propuesta. Se trataba de un plan de empleo garantizado para las personas que llevan dos años en paro. «Con los 45 millones de euros que el presidente Lambán ha perdonado a los ricos reformando el impuesto de Sucesiones, se pueden crear 1.800 puestos de trabajo», aseguró el candidato de IU a la Presidencia del Gobierno de Aragón.

Pidió el voto a los que luchan y a los que no se conforman. Y animó a la participación en una cita en la que la izquierda, como todo Aragón, se juega mucho.