El Justicia de Aragón, Fernando García Vicente, acaba de realizar un servicio impagable a la comunidad procediendo a dar a la imprenta, en una bella edición facsímil, el Fuero de Jaca.

Concesión, como el propio Justicia recuerda en su prólogo, del segundo rey de Aragón, Sancho Ramírez, a la misma ciudad donde se erigió la primera catedral de estilo románico y la primera sede episcopal del reino. Y así costa en el crismon: "In nomine Domine nostri Ihesu Christi et indiuidue Trinitatis, Patris et Filii et Spiritu Sancti amen. Hec est carta auctoritatis et confirmationes quam ego Santius, gratia Dei Aragonensium et Pampilonensium, facio uobis notum omnibus hominibus, qui sunt usque in orientem et hoccidentem, et sepremtrionen et meridiem, quod ego uolo constituere ciuitatem in mea uilla que dicitur Iaka".Iaka, la mítica Jaca altomedieval... Su fuero es, para García Vicente, exceptuando la extremadura turolense, "el padre de todo el Derecho de Aragón, una de nuestras más importantes señas de identidad y quizá nuestra principal aportación a al cultura europea". En esta línea, el Justicia recuerda que, mientras el Código Civil español es copia literal del francés en más de la mitad de sus artículos, "el Fuero de Jaca ha sido capaz de crear un sistema original que ha inspirado nuestra legislación durante casi mil años, y ha traspasado nuestras fronteras. Recogido en la Compilación de Huesca, hoy continúa siendo la base de nuestro ordenamiento jurídico".Doy por supuesto que esta novedad editorial hará las delicias de historiadores y juristas, pero también el profano puede encontrar algún gozo y muchas curiosidades en sus numerosos capítulos y artículos, expurgados de un corpus de más de trescientos pergaminos divididos en siete redacciones en provenzal, acumuladas entre los años 1230 y 1380. Vean cómo se regulaba la dote de la mujer infanzona: "Qvan alguna muyller infan§ona pren marit, lo marit la deu dotar de tres heredatz si las ha a la hora o las aura d´alli enant..." O el homicidio entre infanzones:

"Qvan alguna muyller infan§ona pren marit, lo marit la deu dotar de tres heredatz si las ha a la hora o las aura d´alli enant..." "Si infan§on mata altre infan§on, e pero no a traytion, per fuero d´Aragon... iurara sobre l´altar en que iuraran per homicidi que no mato aquel hom de qui es accusat, asi, segont fuero, es solt quant a omnes.".El presente volumen, en el que han colaborado el Justiciazgo e Ibercaja, ha tomado como base la formidable edición de Mauricio Molho, publicada por primera vez en 1964, por el CSIC.Molho, según recuerda Félix Monge, nació en Constantinopla, en 1922, en el seno de una familia sefardí. Su padre, Rafael Molho, era comerciante de tejidos en la actual Estambul. Acogiéndose a un decreto de Primo de Rivera, la familia Molho obtuvo la nacionalidad española. Residieron en Barcelona, donde Mauricio estudió Filosofía y Letras, doctorándose en Madrid bajo la dirección de Rafael Lapesa. A raíz de unos manuscritos que le mostró Martín de Riquer, Molho descubrió una compilación redactada en una lengua que calificaron de provenzal aragonesa...El volumen se complementa con estudios de

Mauricio Molho

Félix MongeRafael MolhoPrimo de RiveraRafael LapesaMartín de Riquer

María Luisa Arnal, Ana María Barrero, Jesús Delgado, María Antonia Martín, Angel Sesma y Vicente Bielza.