La decisión de Teruel Existe de ser uno más en las Cortes de Aragón lo trastoca todo: tanto los cimientos de un cuatripartito que se agrieta por las cuitas internas de sus formaciones; al cambio del marco de la conversación política donde la órbita de Zaragoza como gran urbe aún monopoliza casi cualquier debate.
El fenómeno de Teruel Existe no sólo ha llegado para que la despoblación sea el tema principal de las políticas públicas. Su entrada en el espacio político que le vio nacer en 1999 estará anclada en la nueva revolución localista que busca una confrontación directa con las capitalidades. El fenómeno se repite en toda España con Soria Ya! o Jaén se merece más. Y Zaragoza es el objetivo: un auténtico titán económico que cada vez capta más inversiones millonarias. Del España nos roba al Zaragoza nos quita el pan.
Entre los actores perjudicados, nadie duda que su aterrizaje en la política regional acecha principalmente al PSOE. Y más aún a la líder socialista en Teruel, la presidenta en funciones Mayte Pérez, tal y como demostró ayer al exigir más explicaciones a Guitarte tras las acusaciones de Teruel Existe al boicot que ejerce Aragón. Pocas veces ha quedado más claro reflejado el nerviosismo en política porque sabe que su peso en el futuro del socialismo aragonés está condicionado al resultado que pueda tener el partido de Guitarte en las próximas elecciones. Porque el campanazo de Teruel Existe en las generales doblegando al bipartidismo podría ser peccata minuta si mantiene esos resultados.
Entre tanto el tiempo pasa y aún hay dudas que Teruel Existe debe resolver: ¿serán capaces de insistir en que no tienen ideología? ¿Hay alguien más que los tres mosqueteros Guitarte, Egea y Matin? O la pregunta del millón: ¿cómo se explica que Teruel Existe tenga la mitad de votos en Teruel capital y apenas en donde sí se sufre la despoblación?
