Teruel ha vivido hoy la última jornada de la Partida de Diego en la que el joven se ha unido a las huestes de Aragón y marchó a Toledo junto a las tropas del Rey de Aragón para intentar hacerse con la fortuna necesaria y poder contraer matrimonio con Isabel. Antes de partir, Diego ha querido despedirse de su amada Isabel con la esperanza de reencontrarse lo antes posible y hacer posible su amor. 

La última jornada de La Partida de Diego ha continuado con la implicación del público que se ha emocionado enormemente al presenciar la despedida entre Isabel y Diego. Previamente, Pedro II, Rey de Aragón, ha regresado a la plaza del Seminario para nombrar caballeros a todos los que ayer se alistaron para partir a la Cruzada y han pasado la noche velando sus armas. Entre ellos, el joven Diego acompañado de su hermano Sancho y su mejor amigo, Alonso de Fuenmayor. 

La villa se ha quedado con sus mujeres al frente, quienes interpretaron la escena de La Mujer que Espera, este año introduciendo el lenguaje de signos para hacerla más inclusiva gracias a la colaboración de los alumnos del módulo de Mediación Comunicativa. Estos signos han enfatizado una de sus frases principales “Somos el pulso de la esperanza” como símbolo de la importancia del papel de la mujer cuando los hombres parten a la batalla.

La actividad finalizó con un vermut musical amenizado por el grupo Charraire, que previamente desfiló por las calles de la villa animando la actividad en el mercado. Así se ha puesto el cierre a una edición donde la música tuvo especial protagonismo. Además, el viernes finalizó el X Congreso Internacional de Fiestas y Recreaciones Históricas bajo el lema ‘Tolerancia y diversidad en la Edad Media’.